28 feb 2013

Sin patria ni bandera…


Ponemos proa a la utopía, sin embargo parece que lo hacemos boca abajo…no sé cómo explicarlo…además, un sentimiento de desprotección me invade, como si hubiese salido recientemente de la bolsa marsupial…y me enfrentara a la fría realidad ajena a mis raíces…

Así es la vida del marinero que surca la procelosa mar espaciotemporal…sin patria ni bandera…nuestros viajes a través del espacio tiempo no nos permiten acomodarnos en ninguna coordenada…Pero hoy, tengo la impresión de que la sombra de la falta de asilo nos acecha más que nunca…




Sólo necesito tiempo y espacio, esperando a que los agujeros de gusano se conviertan en papel en blanco donde podemos escribir de nuevo nuestro futuro…o reinventar nuestro pasado…
Pasamos página y tras las ráfagas musicales del viento, nos encontramos revisando los mitos con los que hemos crecido, releemos las leyendas que navegan con nosotros desde que nos embarcamos en esta singladura y los cuentos… que sólo cuentos son…

Seguimos navegando… giran las manecillas del reloj, bailan los dígitos en maratones de veinticuatro horas, pero el momento queda suspendido. Sólo cabe plantar la mirada un punto más allá del horizonte, y soñar con que se cumpla esa famosa ley universal que reza: cuando un tirano sale por la puerta, por la ventana asoman las dársenas amables de la AltaDimension.
PD:
“El tiempo del talento se pasa rápido como 

hace el viento,y tu muchacho ya lo estás perdiendo, 
cruce de miradas con solo un gesto,sobran las palabras 
y otra noche vuelve a las andadas 

Supersubmarina